MIS EXPERIENCIAS DE VIAJE

El regreso a casa, luego de casi 3 años!

Cambiando los planes de un día para el otro decidí a fin de Enero volver a Buenos Aires, y en esta nota les cuento cómo ha sido luego de haber estado viajando por casi 3 años.

Aeropuerto de Barcelona – Esperando para tomarme el avión de regreso a Argentina

Si bien en Andorra yo ya veía que no iba a conseguir trabajo porque la temporada estaba casi muerta, uno la ilusión nunca la pierde… pero los ahorros se agotaban y el Universo es tan sabio que te enfrenta a situaciones en donde tenes que sí o sí tomar ciertas decisiones. La mía? Mi mamá se enfermó de Covid, por suerte muy leve, pero con la mala suerte de tener dos desmayos en menos de una semana y en ambos golpearse… y eso a la distancia pesa mucho! Sobre todo cuando al principio no se saben las causas.

Todo fue muy rápido al suceder en menos de una semana, y al segundo llamado de mis hermanos contándome que mi mamá había vuelto a desmayarse y esta vez abrirse la cabeza (aun no sabíamos que había sido como consecuencia del covid) hizo que mi primer reacción fuera querer tomarme el primer avión a Buenos Aires.

Cuando uno está lejos hay cosas que se las imagina, pero que no sabe realmente cómo puede reaccionar hasta que suceden. Y encima que yo en los últimos meses ya venía extrañando muchísimo a mi familia, mis amigos, mi perro, tomé la decisión de regresar. Por lo que luego de calmarme y averiguar todas las cosas que tenía que hacer para el vuelo (pcr de por medio) me saqué un vuelo para fin de esa semana y sin pensarlo demasiado me encontraba nuevamente en un avión pero esta vez que me llevaría de nuevo a casa.

TANTO cuentan los viajeros sobre la vuelta luego de tantos años, que no se imaginan todos los miedos que yo tenía de volver a mi casa, al lugar que me dio la vida. Si! Raro porque uno piensa que es el lugar que más conoce, y donde se debería sentir más cómodo que en cualquier otra parte del mundo… pero volver después de tanto (que aunque sea muy poco) es un viaje!

Por supuesto lo más emocionante fue el reencuentro con mi familia, sobretodo porque si bien mis hermanos sabían de mi vuelta al resto no les dije nada, por lo que para mis padres fue una terrible sorpresa! Y para mis sobrinos una gran alegría! (o eso creo jaja).  

Y si bien ya hace 4 meses de mi regreso, aún las cosas siguen siendo nuevas. Sigue habiendo cosas que descubro y otras que me sorprenden.

La realidad es que esta nota me gustaría escribirla cuando me vuelva a ir del país, pero no los quería dejar tanto tiempo sin subir nada! Así que contaré algunas cositas que me viene trayendo esto que yo llamo “parte de mi viaje”. Aunque en verdad es como que me gusta también nombrarlo como fin de la primer parte de mi primer viaje. ¿Por qué? Porque creo que el viaje que ya ha sido, fue perfecto para mi evolución y aprendizaje que necesitaba en estos tres últimos años… pero ahora se viene otro aprendizaje y otro crecimiento (tanto en Argentina como en los próximos países que vienen).

Qué les puedo contar de mis emociones cuando volví? Eran una montaña rusa, un parque de diversiones entero mejor dicho! Mucha emoción: al abrazar a mi familia, al reencontrarme con mis amigos, al caminar por mi barrio (el mejor de Buenos Aires, por supuesto, mi tan amado Boedo!). Y cuando digo emoción, me refiero a todas las emociones que pueden imaginarse. Porque además de volver (como nos pasa a muchos), me encontré viviendo con mis viejos después de 11 años! Así que imagínense todo lo que ello conlleva!

Les cuento que 3 años es poco pero es un montón para estar lejos de casa… en 3 años uno (si quiere) cambia mucho, y les prometo que en muchos aspectos no soy la misma que se fue con los ojos llenos de ilusiones y de no saber qué iba a pasar! Fueron 3 años de evolución constante, de aprendizaje constante, de sentir cosas que uno no sabía que tenía y 3 años de abrazarse con uno mismo porque es la forma que tiene de cuidarse (aunque por momentos esté acompañado).

Y algunos pensarán que soy exagerada, pero volver a casa luego de esta maravillosa experiencia es un montón! Es un montón de sentimientos, de sentirse feliz al reencontrarse con los suyos y al mismo tiempo decir “ya es suficiente”, de por momentos sentirse un fantasma porque en esos lugares donde las personas te conocían ahora las personas no saben quién sos, de sentir que ese lugar que antes era tuyo ahora no lo es tanto y por momentos seguís siendo un turista en tu propio lugar.

Un montón de sentimientos. Un montón de preguntas que ni siquiera sabes qué responder: ¿Hasta cuándo te quedas? ¿Ya te vas? ¿Qué se siente volver? ¿Cómo ves la ciudad… y el país? ¿Qué aprendiste? ¿A dónde te irías a vivir? ¿Allá hacen todo mejor que acá, no? Y muchas más…

Y sinceramente uno no sabe qué responder! Más viviendo en época de pandemia, no? Porque a los pocos días que llegas, pensas: cuándo me vuelvo a ir por favor! Y por momentos mirás a tu familia, volves de una juntada increíble con tus amigos y pensas “cómo extrañaba tanto todo esto!, quiero que sea eterno”.

“Una vez que has viajado, la travesía nunca termina, sino que es recreada una y otra vez a partir de vitrinas con recuerdos. La mente nunca puede desprenderse del viaje”. – Pat Conroy

En verdad tengo para contar tantas cosas que no entran en una sola nota, por lo que seguramente la misma siga en unos meses más cuando ya no esté en Argentina (sí ya estoy planeando irme unos meses, pero aún no se enterarán a dónde!). Sólo quiero terminar desmitificando algunas cositas que muchos de los que viajamos decimos cuando volvemos a Argentina:

  • Así como en muchos momentos uno ve que es un país en donde las cosas realmente cuestan, y a uno le agarra la angustia, la desesperación y todos esos sentimientos, creo que el país, las raíces siempre hacen que uno vuelva y que hasta esté a gusto en su lugar. Yo básicamente reconfirmé que si no me gustaría volver a vivir en la ciudad pero porque me gusta más estar en lugares tranquilos, con más naturaleza, por eso si vuelvo a vivir a mi país lo haría en otra ciudad de la que soy, donde hay otro estilo de vida… Por supuesto que quiero seguir viajando, que no me voy a quedar quieta, pero si en algún momento elijo volver para quedarme tampoco estaría mal.
  • Mucho pensaba del reencuentro con mis amigos (esto igual creo que es súper personal), de que muchos me decían que las cosas no serían igual, básicamente porque las prioridades cambian… quizás por ejemplo la prioridad de algún amigo hoy sea su hijo y para mi conocer más lugares, o para otro fuera la preocupación de cambiar de trabajo pero seguir en este maldito sistema al que estamos acostumbrados y para mi ver en qué país hacer temporada para seguir viajando… Pero sinceramente agradezco a la vida porque con ninguno de ellos me pasó eso, todo lo contrario! Todos los reencuentros con mis amigos fueron increíbles y lo siguen siendo! Con ellos el tiempo pasó pero nosotros seguimos teniendo esa complicidad que sólo nosotros conocemos y es lo que amé! Saber que cada una de las personas que elegí para que me acompañen en este camino de la vida son increíbles y perfectas!  Y agradezco con mi alma eso. Gracias!!!
  • Y reconfirmo algo que ya pensaba antes de irme y esto es más propio mío… uno puede reconocerse y sanar cada uno de los aspectos de su vida en donde sea! No hace falta estar en India para ser más espiritual o en Tailandia para ser budista. No hace falta ir al Vaticano para mostrar cuán católico es, o estar en Irlanda para tomar la mejor birra! O en Italia para comer la mejor pizza (aunque la mejor es la nuestra). Uno evoluciona donde esté, y particularmente este paso por Argentina a mí me está haciendo ver todas mis sombras para abrazarlas, aceptarlas y evolucionar. Algunas por supuesto cuestan más que otras pero en ese camino me encuentro. De hecho, en este país carnívoro es donde decidí ser vegana, cada vez más!

Como verán en esta vuelta hubo muchísimas cosas! Y hasta quizás no las entiendan tanto porque debería sentarme con cada uno de ustedes a explicarle un poco más de mi vida, pero cada uno de esas cosas fue y están siendo perfectas para seguir.

Agradezco estar hoy en mi tierra. Agradezco estar aquí trabajando, disfrutando y viviendo con mi familia porque en este momento tan difícil para todo el mundo, me siento una afortunada!

En las próximas notas les contaré de los viajecitos express que hice aquí dentro del país en estos pocos meses (y sí! No me puedo quedar quieta, eso ya lo saben!), a Mendoza, Córdoba y San Luis!

Gracias, gracias y gracias!

Y a todos los que me siguen leyendo, gracias también porque con este blog lo único que pretendo es que las personas quieran cumplir esos sueños que siempre quisieron y que muchas veces no se animan. Lo único que les puedo decir es que tómense el tiempo para escuchar a su Alma, que ya sabe qué es lo que quiere; nosotros como humanos sólo debemos seguir sus pasos para ir hacia donde tenemos que ir!

“Al pasado, una reverencia infinita por haber sido maestro indiscutible del presente. Y al presente, valija en mano. Momento de saber que no solo somos lo que fuimos. También somos todo lo que podemos llegar a ser. Bienvenido presente. Pero bienvenido, al fin.” – Del libro: Cúrame de Lorena Pronsky.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *