Esta era la segunda vez en el viaje que llegaba a esta ciudad y fue en esta vez donde sentí algo diferente cuando pisé la ciudad… me pareció que Berna (como le dicen los catalanes) estaba un poco dejada. No sentí que fuera la misma en la que había estado los dos años anteriores (ojo! no quiero decir que haya perdido su belleza).

Fueron tres días de descanso, de sólo ir a la playa todo el día. De caminar y reencontrarme con amigas. De conocer también personas nuevas.

Tengo que agradecer también a Paty (una chica madrileña de la cual me hice amiga en Tailandia, compartiendo dos días en las islas Phi Phi) que me hospedó el último de mis días en la ciudad, me llevó a cenar y a bailar a uno de los bares más conocidos por los catalanes!

“La libertad está en ser dueños de nuestra propia vida.” – Platón

QUÉ ME LLEVÉ DE MI PASO POR BARCELONA?

Como luego volveré a esta ciudad más adelante y durante más tiempo mis conclusiones de la ciudad se las contaré en esa nota. Hoy quiero decir que de este fugaz paso me llevo:

– saber que cuando uno tiene amigos de fierro puede contar con ellos en cualquier momento y lugar (GRACIAS Mica por estar siempre).

– lo lindo de la calidez humana de que casi sin conocerte, te abran las puertas de su casa y compartan tiempo con uno como si nos conociéramos de toda la vida.

– que los planes cambian porque la vida quiere que uno sea siempre feliz! Sólo depende de uno cómo nos tomamos las cosas.

– reconfirmar que los cambios siempre son para bien.

– lo importante de estar abierto a que las cosas sucedan, sin tanto pensarlo, sin hacerse drama.

– dejarse llevar, fluir con la vida y con las circunstancias.

Estos poquitísimos días me sirvieron para continuar a mi próximo destino con una sonrisa y más que expectativa de ir a un nuevo país sin haberlo pensado nunca! Un largo viaje me espera, para llegar a Londres…

“Un viaje se mide mejor en amigos que en millas” – Tim Cahill